
En el caso de Melk, a diferencia de otros conventos barrocos es la iglesia la que domina sobre el edificio. El visitante tiene prácticamente sólo acceso a los salones del edificio dedicados a museo, pero en cambio, ha habido mucha vida entre estos muros viejos. Desde hace 900 años, monjes oran y laboran en este lugar. El convento tiene hoy en día dos tareas, por un lado, la educación y la enseñanza y, por otro, la asistencia pastoral parroquial. En el monasterio hay un instituto de bachillerato público donde se enseña una rama de lenguas clásicas y otras lenguas modernas y, además, otro instituto de bachillerato superior con diferentes especialidades. A las tareas adquiridas a lo largo de la historia, hay que añadir además aquellas otras de asistencia pastoral que se han ido incorporando a lo largo de los últimos años, como ejercicios espirituales, ceremonias de clausura escolar, jornadas de orientación, vísperas juveniles y semanas de la juventud.
Las características arquitectónicas del monasterio crean un ambiente de belleza y grandeza que no solo impresiona al visitante, sino que además, refleja positivamente el trabajo interior de la casa.
1 comentario:
Da la sensación de que lo habéis copiado directamente de algún sitio. Además es una obra arquitectónica que aparece repetida, el grupo de Pol, Serín y Tapia también la tienen.
Publicar un comentario